Ante la caída de finales de 2016, según IDC en el primer trimestre del presente ejercicio se vendieron 347,4 millones de teléfonos, un 4,3% más. Todo gracias a los OEM chinos con Huawei, Oppo y vivo a la cabeza.
IDC acaba de publicar los resultados de las ventas mundiales de smartphones correspondientes al primer trimestre de 2017. Según la consultora, en este periodo se vendieron un total de 347,4 millones de teléfonos inteligentes. A pesar de que parece un mercado que se está ralentizando, los consumidores continúan demandando estos dispositivos y el revuelo por el OEM flagship parece más fuerte que nunca. En concreto, las ventas de móviles a nivel mundial crecieron un 4,3% en los primeros cuatro meses del año; un resultado que ha sido levemente más alto que la predicción anterior de la firma, que predecía un crecimiento del 3,6%.
Han sido los OEM chinos los que han logrado incentivar el negocio con Huawei, Oppo y vivo a la cabeza, registrando crecimientos por encima del mercado durante más de un año y ganando participación en nuevos territorios.
De acuerdo con Anthony Scarsella, director de investigación de IDC, muchas compañías están apostando por modelos mucho más asequibles pero con estilo premium. Y confían en que será la venta de este tipo de dispositivos en una amplia variedad de mercados los que harán aumentar todavía más el negocio en el futuro.
Analizando estos resultados por fabricantes, Samsung recuperó el control como el líder en el mercado mundial de smartphones a pesar de un primer trimestre plano (0% de crecimiento interanual). Los descuentos en los modelos Galaxy S7 y S7 edge abrieron paso a los nuevos S8 y S8+. La Serie J y la Serie A impulsaron volúmenes significativos tanto en los mercados emergentes como en los desarrollados gracias a la combinación de diseño y precios asequible. De cara al resto del año, la positiva respuesta al recientemente lanzado S8 y S8 + parece prometedora, ya que puede poner final al fracaso provocado por el Samsung Note 7.
Por su parte, Apple (el iPhone 7 Plus, iPhone SE y pintar de rojo su último modelo) se mantuvo prácticamente plana, con 51,6 millones de unidades comercializadas en el primer trimestre, ligeramente por debajo de los 51,2 millones enviados el año pasado. De cara al resto del año, se rumorea el lanzamiento en otoño de una edición especial del iPhone como motivo de su décimo aniversario. Se cree que las novedades vendrán en el diseño, su tamaño de pantalla y actualizaciones de rendimiento.
El empuje de los fabricantes chinos
Huawei mantuvo su predominio en China creciendo casi un 22%: sus envíos subieron de 28,1 millones de unidades el año pasado a 34,2 millones de unidades en el primer trimestre de 2017. Su posición estable en el entorno premium la defendió con la serie P y Mate, mientras que en la gama media cuenta con la marca Y y Honor. Sin embargo, aunque la compañía anunció a principios de mes que el Mate 9 ha vendido más de 5 millones de unidades desde su lanzamiento en noviembre, en Estados Unidos, el dispositivo, así como la marca, no ha captado la atención del consumidor. Esta atención en Estados Unidos es algo que necesitarán si aspiran a desplazar a los dos líderes del mercado. El lanzamiento del nuevo buque insignia P10 y el nuevo P10 Plus al final del trimestre presenta a los consumidores una tercera opción válida (fuera de Apple y Samsung) para el próximo trimestre gracias al diseño premium y a su rendimiento.
La gama media de los teléfonos Oppo, caracterizado por la incorporación de la cámara R9s, fueron cruciales en China ayudando a la firma a incentivar sus ventas. Sin embargo, el crecimiento ha sido más fuerte fuera de China, con casi una cuarta parte de los envíos en mercados internacionales. En el resto de Asia y en menor grado en las regiones de Oriente Medio y África, su fuerte presencia minorista le ha ayudado a seguir creciendo en su negocio.
Finalmente, Vivo también basó su éxito en China en el modelo x9 que siguió generando un montón de bombo gracias a su cámara selfie, dirigido a menores de 30 años.
Fuente: redestelecom.es