Australia dijo el jueves que investigaría una interrupción en la empresa de telecomunicaciones Optus que cortó las conexiones telefónicas y de Internet a casi la mitad de su población, causando un caos generalizado y llevando a algunos clientes de pequeñas empresas a buscar una compensación.
Más de 10 millones de australianos, el 40% de la población, se vieron afectados por el apagón de red de 12 horas en la segunda empresa de telecomunicaciones del país durante gran parte del miércoles, provocando furia y frustración entre los clientes y generando preocupaciones sobre la infraestructura de telecomunicaciones del país.
El gobierno emprenderá una revisión posterior al incidente que afectó a los pagos, el transporte y los hospitales, dijo la ministra de Comunicaciones, Michelle Rowland, y describió los impactos como «particularmente preocupantes».
«Aunque celebramos que los servicios de Optus se hayan restablecido a lo largo del día, es fundamental que el gobierno lleve a cabo un proceso para identificar las lecciones que se pueden aprender de la interrupción de ayer», dijo Rowland en un comunicado.
El regulador de medios de Australia llevará a cabo una revisión separada de la interrupción después de que se interrumpieran las llamadas de emergencia triple cero («000») en los teléfonos fijos de Optus, agregó Rowland.
El taxista Ian Martin-Brown le dijo a Nine Network que podría emprender acciones legales después de perder un día de trabajo. Otros clientes, incluidos propietarios de cafeterías y minoristas especializados en línea, dijeron a los medios de comunicación que buscarían una compensación por la pérdida de ingresos.
«No hay duda de que tiene que estar sobre la mesa», dijo el tesorero adjunto Stephen Jones a ABC Radio. «Si usted es una pequeña empresa que ha perdido las ganancias de un día porque su sistema telefónico no funcionaba, entonces tendrá que hacer esas preguntas difíciles».
Optus, propiedad de Singapore Telecommunications (Singtel), no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Optus no ha facilitado la causa de la interrupción sin precedentes, una de las mayores que ha presenciado el país, pero ha descartado por ahora cualquier ciberataque.
Singtel dijo que la interrupción había «decepcionado a nuestros clientes» y se disculpó cuando informó el jueves de un aumento del 83% en sus ganancias semestrales.
Pero los analistas de UBS dijeron que Optus ahora enfrenta la posibilidad de perder clientes frente a Telstra, la firma de telecomunicaciones más grande del país, y TPG Telecom debido a «fuertes percepciones de marca» sobre la calidad de la red de los rivales.
El gobierno dijo que también comprobaría la posibilidad de permitir a los clientes cambiar a las redes disponibles cuando se produzcan cortes futuros.
«La industria está preparada para participar… es factible y vamos a llevar esto adelante como gobierno», dijo Rowland a la ABC.
Información de Renju José en Sydney; Edición de Jamie Freed
Fuente: reuters
