Los mercados se nutren cada vez más de los trabajadores freelance, una modalidad laboral auspiciada por el avance de la tecnología, la flexibilidad de las empresas y el auge del trabajo remoto. Pero, ¿conoces sus ventajas y desventajas?
Si atendemos a las cifras, el 35% de los trabajadores de Estados Unidos son freelance y solamente en este país, ganaron un billón de dólares el pasado 2015. Las compañías cada vez son menos reacias a descentralizar procesos laborales y la contratación de trabajadores remotos de áreas tan diversas como la programación web, el SEO, la redacción digital o el diseño gráfico está a la orden del día.
4 maneras de fijar tus tarifas como freelance
Si estás pensando en apostar por este tipo de trabajo y convertirte en profesional por cuenta propia, ya sea desde tu casa o desde un espacio de coworking es importante que sopeses las ventajas de ser freelance y también el reverso menos agradecido, ya que al igual que te permite mayor libertad horaria y la gestión de tus flujos de trabajo, tus ingresos pueden ser más volátiles y tendrás que renovarte constantemente para enfrentarte a un mercado cada vez más feroz.
3 ventajas de trabajar como freelance
- Establecer tus propios horarios: Aunque obviamente deberás cumplir las deadlines y los plazos de entrega con tus clientes, poder establecer tu jornada laboral según los diferentes proyectos que afrontes o tus picos de productividad te permite una mayor libertad horaria y una mejor conciliación con tu vida personal y familiar más flexible.
- Control sobre tus proyectos y libertad creativa: Al ser tu propio jefe, podrás decidir qué proyectos rechazar y cuáles aceptar, diferenciándote por tu propio sello o estilo y aumentando tu prestigio de la mano de tu marca personal y del portfolio a tus espaldas.
- Movilidad geográfica: Los freelances no solamente tienen más libertad horaria, sino también más flexibilidad para elegir en qué ciudad vivir o en qué lugar desempeñar sus tareas laborales, ya sea una oficina, un espacio de coworking, un bar o su propia casa. A través de herramientas como wl software colaborativo, el correo electrónico o las aplicaciones de videollamada puede comunicarse con los clientes sin necesidad de quedar in situ.
Pese a las múltiples trabajas administrativas a las que se enfrentan los trabajadores autónomos, también cabe destacar el acceso a determinadas bonificaciones y deducciones de gastos, como la medida recientemente aprobada en nuestro país que permite deducirse hasta 26,67 euros diarios en dietas.
3 desventajas de trabajar como freelance
- Cargas fiscales y trabas burocráticas: Los freelances se enfrentan a fuertes cargas impositivas -algo que en nuestro país, denuncian asociaciones como ATA o UPTA exigiendo nuevos paquetes de medidas de ayuda-, deben costearse la Seguridad Social y en líneas generales, tienen acceso a una peor cobertura médica que los empleados por cuenta ajena.
- Menor estabilidad económica: Por una parte, cabe destacar que el freelance debe asumir todos los costes técnicos y de infraestructura, desde habilitar su casa a pagar Internet o alquilar un espacio de coworking, algo que no sucede con los trabajadores por cuenta ajena. Además, al no contar con un salario fijo al mes, es habitual que existan fluctuaciones mucho mayores en los ingresos y gastos, algo que afecta a la capacidad de ahorro o al nivel de vida, por ejemplo en épocas como el verano. El carácter más impredecible de este empleo hace más inestable la economía del freelance.
- Problemas de impagos y morosidad de clientes: Desde las propias Administraciones Públicas a los clientes particulares o empresas, muchos trabajadores freelances tienen problemas de impagos o retrasos en el abono de sus facturas, algo que puede perjudicar seriamente su economía personal y su nivel de ingresos periódicos, ya que existen ocasiones en las que el abono de dinero no se llega a realizar nunca.
Algunas de las soluciones propuestas por los trabajadores autónomos para resolver este problema en España han sido la creación de un cuerpo de inspección para vigilar y controlar los pagos fuera de plazo, la fijación de un recargo automático del 20% en las facturas pagadas fuera del plazo legal o la creación de un régimen sancionador.
Fuente: ticbeat.com