Canadá es el país pionero que sienta la base para democratizar la conexión a Internet de alta velocidad para toda la población. En 2021, el 90 por ciento del territorio canadiense tendrá conexiones a Internet de, al menos, 50 Mbps.
El Internet de alta velocidad está considerado como un derecho básico en Canadá. Mediante una nota de prensa, Jean-Pierre Blais, director del organismo regulador de telecomunicaciones, ha explicado los objetivos que el Gobierno tiene en los años venideros con el fin de cumplir este propósito.
Un 57% de la población mundial no tiene acceso a Internet
“El futuro de nuestra economía, de nuestra riqueza y de nuestra sociedad depende de que nos marquemos metas ambiciosas y una de ellas es conectar a todos los canadienses para el siglo XXI. Es una meta ambiciosa y que no será fácil de completar ni barata, pero no tenemos elección”, ha apuntado el responsable.
Un derecho básico que todavía no está garantizado
Con esta medida, Canadá se convierte en el primer país del mundo que declara el acceso a Internet de alta velocidad como un derecho básico para todos sus ciudadanos. Hasta estos momentos, sus habitantes tenían derecho a un hogar, a comida, vestimenta digna y llamadas telefónicas, siendo este último el único servicio de telecomunicaciones considerado como derecho básico.
Es preciso destacar que aunque un derecho sea básico, no equivale a que esté garantizado. Desde Canadá impulsarán para lleno un completo y ambicioso paquete de medidas orientadas a garantizar conexiones, por lo menos, de 50 Mbps en áreas rurales y remotas de Canadá.
Los desafíos son muchos si tenemos en cuenta que existen regiones canadienses sumamente frías, con temperaturas de hasta 40 grados bajo cero, que dificultan la integración de las infraestructuras de telecomunicaciones. Para posibilitar las instalaciones, Canadá destinará cerca de 750 millones de dólares.
Para que esta medida se salde con éxito, Blais apunta a que será precisa la cooperación entre todos los actores del sector de las telecomunicaciones. Así, todos los niveles del gobierno deberán abordar las lagunas en la alfabetización digital. “Las preocupaciones por la accesibilidad se abordan mejor mediante la aparición de un mercado dinámico donde los proveedores de servicios compiten por el precio de los servicios de telecomunicaciones, junto con los programas de responsabilidad social de las compañías de telecomunicaciones y los diferentes niveles de gobierno”. ha apuntado.
Además, las operadoras deberán poner en marcha antes de seis meses sistemas accesibles para todas aquellas personas con dificultades auditivas o del habla.
Fuente: ticbeat.com