La propaganda yihadista genera millones de clics en todo el mundo y se ha convertido en una nueva herramienta de la cada vez más temida «Netwar»(guerra en la red), que se nutre de internet para difundir sus mensajes extremistas.
Y así como las tropas avanzan o retroceden sobre el terreno, los tuits, videos, fotos y posts de redes sociales se propagan por la red como un enjambre de abejas en busca de miel.
El objetivo: reclutar seguidores y, en última instancia, lograr su radicalización.
El centro de investigación británico Policy Exchange acaba de publicar los resultados de un análisis a gran escala sobre este fenómeno, elaborado por tres académicos especialistas en la materia.
En su informe de 130 páginas explica cómo usan internet los extremistas, en qué países tienen más éxito y qué se puede hacer para combatirlo.
Y sitúa a Reino Unido -foco de más de cinco ataques calificados como «terroristas» en lo que va de año- en una posición preocupante: es el segundo país europeo en el que se consume más contenido yihadista.
El primero en la lista es Turquía, seguido de Estados Unidos, Arabia Saudita e Irak.
Principales audiencias de contenido yihadista en internet*
*segun número de clics entre febrero y mayo de 2017
1. Turquía
16.810 clics
2. EE.UU.
10.388 clics
- 3. Arabia Saudita 10.239 clics
- 4. Irak 8.138 clics
- 5. Reino Unido 6.107 clics
- 6. Egipto 5.410 clics
Los especialistas contaron el número de clics en enlaces con contenido extremista -de corte yihadista- entre el 19 de febrero y el 3 de mayo de 2017 y detallaron cuáles fueron los sitios web más visitados.
Un enlace corto a una página de Telegram y varios de agencia de noticiasAmaq, considerada un medio oficial del grupo extremista Estado Islámico, encabezan la clasificación de clics.
Los «tentáculos» del yihadismo
También figuran en la lista enlaces de Twitter (un 40% del tráfico), mensajes de la aplicación Telegram, Facebook y Google (incluido YouTube).
«El ecosistema [de propaganda] yihadista, que se basa en Instagram, expande sus tentáculos en cientos de dominios diferentes. Es robusto y abarca una audiencia de, por lo menos, decenas de miles de personas», explican los analistas, que centraron su investigación en el autodenominado grupo Estado Islámico (EI).
«Durante al menos este año, la producción de contenido ha continuado, a pesar de la muerte de figuras clave, pérdida de territorio y continuos combates».
«Por ahora, está claro que [los británicos] no estamos ganando la guerra de internet«, se lee en el informe de la firma inglesa. «La oleada de ataques terroristas sufridos en la primera mitad de 2017 confirmó que el extremismo online es un peligro real y presente».
En cuanto a Turquía aseguran que entre febrero y mayo de 2017 fue «la localización con más clics» en contenido extremista yihadista. Registraron más de 16.000 clics en poco más de 3 meses.
Respecto a Estados Unidos -el segundo en la lista con 10.300 clics- explican que el hecho de que la mayoría de las grandes plataformas de internet estén basados en ese país supone una «dificultad inmediata».
ALGUNOS DATOS SOBRE ESTADO ISLÁMICO EN INTERNET
- El movimiento ha mantenido una presencia continua en los últimos 3 años.
- Estado Islámico produce unas 100 piezas nuevas cada semana (y a veces muchas más).
- Los videos son una parte crítica de su contenido para superar barreras lingüísticas y propagar mensajes clave.
- Hasta la fecha, EI ha producido 2.000 videos «oficiales». Este número asciende a 6.000 si sumamos otros videos yihadistas.
- Su producción de contenido ha sobrevivido a la muerte de figuras clave, pérdida de territorio y combates.
Fuente: Policy Exchange, «The New Netwar: Countering Extremism Online», 2017.
Medidas «urgentes»
Los expertos piden más acción por parte de Facebook y otros grandes canales de comunicación y dicen que «en los últimos años, ha habido un reconocimiento creciente del reto que supone la ‘radicalización’ en internet.
Los gigantes de internet dicen que han hecho esfuerzos para frenar la expansión de este tipo de contenido.
Google llegó a decir que era «un reto crítico par todos nosotros».
Facebook declaró que está «trabajando enérgicamente» para eliminar la propaganda extremista de su plataforma y ha desarrollado una base de datos de «hashes« (almohadillas o huellas digitales) compartida.
Y Twitter también ha dicho en varias ocasiones que el asunto es prioritario.
Pero los expertos dicen que no se está haciendo lo suficiente.
¿QUÉ MEDIDAS RECOMIENDAN?
- Pedirles a las empresas de internet que implementen códigos de conducta para eliminar el extremismo.
- Aunar esfuerzos con unidades gubernamentales para combatir el terrorismo.
- Establecer reguladores independientes para contenido en redes sociales.
- Poner en marcha un sistema de sanciones económicas.
Fuente: Policy Exchange, «The New Netwar: Countering Extremism Online», 2017.
«Hay un gran debate internacional sobre la necesidad de que las grandes compañías asuman sus responsabilidades corporativas. Deben aceptar su rol fundamental como distribuidores de facto de contenido online».
«El reciente manifiesto de Mark Zuckerberg (fundador de Facebook) sobre la necesidad de un ‘capitalismo responsable’ puede servir de punto de partida para preguntarles a las compañías tecnológicas qué están haciendo para asegurar que se comportan de manera ‘responsable'».
«No cabe ninguna duda de que el asunto es urgente», añaden.
El informe sugiere la implantación de nuevas leyes para criminalizar la «posesión agravada y/o consumo persistente» de ideología extremista que, al mismo tiempo, no criminalicen a quienes «se tropiecen» por casualidad con este tipo de contenido, de forma similar a como se combate la pornografía infantil.
La ministra de Interior británica, Amber Rudd, le dijo a la BBC que «sabemos que EI supone una amenaza en internet, y este informe ayuda a destacar el alcance del problema».
«Les he dicho alto y claro a los jefes de internet que necesitan ir más lejos y más rápido a la hora de eliminar contenido terrorista de sus sitios web y evitar, en primer lugar, que sea publicado«.
Fuente: bbc.com